¿Del olfato nace el amor? Aromas que enamoran
publicado por Alejandra Aviña el“De la vista nace el amor”, este es tal vez uno de los dichos más populares y más equivocados de todos.
Por un lado, es cierto que a través de nuestra vista se crea atracción o cierto interés por una persona, pero el olfato (aun cuando no te des cuenta) es esencial para que nazca el amor. Y es que seguro por lo menos una vez en la vida has dicho algo como “no es mi tipo, pero me gusta”, pues ahora ya puedes señalar a la culpable de eso: tu nariz.
Los lazos amorosos tienen una explicación bioquímica, donde el sentido del olfato es el más poderoso cuando hablamos de contacto sexual.
En el reino animal, este sentido juega un papel indispensable en los rituales de cortejo y apareamiento, gracias a la segregación de hormonas que le indican al macho cuando es el momento de lanzarse con todo para conquistar a la hembra. En nuestro caso, no nos olfateamos como los perritos para conocernos y encontrar pareja, pero pasamos por un proceso similar.
Es aquí donde entran en juego las famosas feromonas, unas sustancias químicas capaces de crear respuestas determinadas. La palabra viene del griego y puede traducirse como llevar o transmitir excitación . Es decir, producen cambios en las estructuras del cerebro, específicamente en el sistema límbico y el hipotálamo; este último es el encargado de las respuestas sexuales de nuestro cuerpo y el cortejo. Y así, las respuestas físicas, emocionales, el placer, el deseo y la atracción no se hacen esperar.
Estas mismas feromonas son las culpables de disminuir tu respiración y aumentar tu frecuencia cardíaca o, mejor dicho, es el backstage de cuando sientes que alguien “te quita el aire” y “acelera tu corazón”.
Quizás para este punto ya lo sospechas, cada persona tiene su propio aroma único e irrepetible que se desprende de su piel y crea vínculos con los demás. Y tú tienes el superpoder de reconocer el olor de tu pareja entre miles.
Aromas afrodisíacos
Además de los olores corporales, se cree que algunos aromas pueden ayudarte a despertar la pasión y darle rienda suelta al deseo.
Lavanda: si buscas relajarte, ésta sin duda es la opción. También ayuda a reducir el estrés y calmar la ansiedad.
Naranja: los aromas cítricos incrementan los niveles de felicidad y pueden estimular el apetito sexual.
Jazmín: una de las esencias más sexys, es capaz de intensificar la sensualidad, la euforia y el amor.
Rosa: una flor sensual por excelencia con suave aroma seductor que no sólo disminuye el estrés sino que es un antidepresivo natural.
Jengibre: es un estimulante natural que aumenta la libido y eleva la temperatura. Psst, ¿recuerdas a Ginger?
Canela: emana un olor sensual y penetrante que se cree que incrementa el flujo de sangre en el pene y ayuda a mantener por más tiempo la erección.
Vainilla: un toque suave y muy dulce que reduce la ansiedad, relaja, mejora el humor e incrementa la energía muscular.